A MODO DE INTRODUCCIÓN
El intolerante considera la argumentación cívica – el compromiso y la flexibilidad interpersonal e intergrupal, la compasión hacia el vulnerable, el respeto a la opinión, el modo de ser y vivir ajenos – como algo peligroso y difícil o imposible de aceptar. Los miembros de la diversidad sexual se ven afectados especialmente por esta visión estrecha, así como también por el modus operandi abusivo que ésta conlleva.
El intolerante sustenta esta actitud porque la pluralidad – que no excluye realmente a la unidad – amenaza directamente a su objetivo por homogenizar la realidad con el fin de manipularla sin cuestionamientos ni obstáculos serios.
El desdén y el control del intolerante son similares a los de un estado totalitario. Este último basa también su modo de gobierno en actitudes patriarcales hacia la sociedad. Marginadas del marco político de unificación forzada que impone cualquier régimen totalitario, las minorías de la diversidad sexual – al igual que los miembros de otros grupos cívicos mayoritarios luchando por sus derechos – amenazan la idea del individuo genérico como mero diente en el engranaje de la maquinaria estatal. Debido a su desconfianza hacia las agrupaciones de la sociedad civil, unido a su escasa capacidad para gobernar con efectividad, esta maquinaria es incapaz de dar cabal reconocimiento a las expresiones personales o de grupos independientes.
El desdén y el control del intolerante son similares a los de un estado totalitario. Este último basa también su modo de gobierno en actitudes patriarcales hacia la sociedad. Marginadas del marco político de unificación forzada que impone cualquier régimen totalitario, las minorías de la diversidad sexual – al igual que los miembros de otros grupos cívicos mayoritarios luchando por sus derechos – amenazan la idea del individuo genérico como mero diente en el engranaje de la maquinaria estatal. Debido a su desconfianza hacia las agrupaciones de la sociedad civil, unido a su escasa capacidad para gobernar con efectividad, esta maquinaria es incapaz de dar cabal reconocimiento a las expresiones personales o de grupos independientes.
Para proteger su legitimidad endeble, la maquinaria estatal necesita esconderse detrás de una estabilidad falsa, y de una unificación férrea basada en la represión.
La situación es aún peor para los integrantes de la diversidad sexual. Su vulnerabilidad facilita que sea presa fácil del manipulador astuto. Existe la difundida percepción, además, de que ellos constituyen una amenaza para la supervivencia biológica, así como para la integridad moral del género humano. Un criterio avalado, abierta o solapadamente, por algunas instituciones importantes, cuya influencia social y gubernamental es vasta y profundamente reconocida. Entre ellas, las religiosas, con la iglesia católica al frente de ellas.
Mi nombre es Oliverio Funes Leal. Nací exactamente a mitad del siglo XX, en la hermosamente colonial ciudad de Camagüey, Cuba.
Fundado en Blogger el 16 de Marzo 2007, GLADIOLO SOY: JORNADA DE UNA GAVIOTA CUBANA es un blog creado por un cubano que, por primera vez, utilizó la estocada simbólica de la flor de gladiolo (la espada) para señalar la fortaleza de carácter inherente a la comunidad global LGBTQ+. Para aprender sobre este reclamo de originalidad, y quien fue el personaje de Gladiolo, lea Flor de Gladiolo: Significado, Simbolismo y Sonido; y la sección ¿Por qué Gladiolo Soy? en la columna lateral de la página inicial.
ACERCA DEL AUTOR
Mi nombre es Oliverio Funes Leal. Nací exactamente a mitad del siglo XX, en la hermosamente colonial ciudad de Camagüey, Cuba.
Cuando comencé este blog en 2007, utilicé temporalmente el seudónimo Pablo Palma Leal. Creí protegerme así de "el qué dirán", y de los peligros reales o imaginados que obsesionan a muchos cubanos, sobre todo al homosexual. No tardé en comprender que ser anónimo desvaloriza a quien usa ese recurso. Además, esto le ofrece más poder y reafirma al intolerante, quien no se esconde para desbarrar sobre sus ataques y rechazos preferidos .
Nuestra familia emigró a Ciudad de la Habana en 1964. Mejorar nuestra situación económica, y escapar de la inercia y el sofoco provincial de aquella época, fueron esenciales en nuestro traslado hacia la capital del país.
Nuestra familia emigró a Ciudad de la Habana en 1964. Mejorar nuestra situación económica, y escapar de la inercia y el sofoco provincial de aquella época, fueron esenciales en nuestro traslado hacia la capital del país.
En 1968, ingresé en la Escuela Nacional de Arte para estudiar artes plásticas. Dos años más tarde perdí interés en esos estudios, debido al rumbo político y anti-artístico tomado por la nueva directiva de ese centro de estudios.
Posteriormente, estudié filología en la Universidad de La Habana desde mediado hasta el final de la década de los años setenta, graduándome en la especialidad de Licenciatura en Lengua y Literaturas Hispánicas.
Trabajé como asistente de diseñador gráfico en los departamentos de publicidad de la Comisión de Orientación Revolucionaria (COR), y también en el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC).
Posteriormente, estudié filología en la Universidad de La Habana desde mediado hasta el final de la década de los años setenta, graduándome en la especialidad de Licenciatura en Lengua y Literaturas Hispánicas.
Trabajé como asistente de diseñador gráfico en los departamentos de publicidad de la Comisión de Orientación Revolucionaria (COR), y también en el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC).
Durante mi tiempo en esta última institución, obtuve una mención con el diseño de un afiche para la película alemana "Goya", en el V Salón Nacional de Carteles 26 de Julio 1972-1973. El reconocimiento se materializó con la entrega de una vasija creada por la reconocida escultora y ceramista cubana Julia González Fornés.
¿Por qué me expongo a ser transparente? Deseo contribuir modestamente a la desaparición, o al menos la disminución de las injusticias, mentiras, y sobre todo el silencio que obstaculiza la comprensión y aceptación de la comunidad LGBTQ+. Apoyo la argumentación serena y clara, por parte de rostros con nombres y apellidos que nos personalicen. En lugar del concepto abstracto, denotado negativamente, con el cual somos generalizados. Esto puede ayudar a educar, y a eliminar gradualmente los prejuicios sostenidos al respecto por el siquismo social. Aún más importante, puede contribuir también a eliminar gradualmente las barreras que nos imponemos nosotros mismos por medio de la negación, la evasión y la desidia sobre todo.
Durante un chequeo médico, en el verano de 1998, supe que era portador del VIH. Este hecho no previsto hizo que mi proceso de legalización se complicara. Gracias a la ayuda de abogados especializados en este tipo de situación, y mis buenos antecedentes laborales, legales y de conducta personal, obtuve un fallo favorable de aceptación por parte de las autoridades de inmigración.
En la actualidad estoy retirado. Llevo una vida simple y permanezco activo física, mental y socialmente. Soy útil de acuerdo a mis posibilidades y recursos. Como trasfondo actual de mi jornada, tengo el privilegio de vivir en la hermosa, diversa, complicada y creativa ciudad de San Francisco.¿Por qué me expongo a ser transparente? Deseo contribuir modestamente a la desaparición, o al menos la disminución de las injusticias, mentiras, y sobre todo el silencio que obstaculiza la comprensión y aceptación de la comunidad LGBTQ+. Apoyo la argumentación serena y clara, por parte de rostros con nombres y apellidos que nos personalicen. En lugar del concepto abstracto, denotado negativamente, con el cual somos generalizados. Esto puede ayudar a educar, y a eliminar gradualmente los prejuicios sostenidos al respecto por el siquismo social. Aún más importante, puede contribuir también a eliminar gradualmente las barreras que nos imponemos nosotros mismos por medio de la negación, la evasión y la desidia sobre todo.