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22 de mayo de 2025

SIMBIÓTICO




El paisaje Nevado de un País Tropical

Esta idea nació de una ocurrencia, alocada pero chistosa, dicha por una parienta lejana en el tiempo y la cual nunca conocí. Aludida antes en este sitio, no fue hasta ahora que la imagen, añorada por ella, cuajó finalmente en mi imaginación.

¡Gracias, Aurora! 
He cumplido tu deseo

 

  



28 de abril de 2025

UN ENORME REINICIO



Activistas críticas sobre el género, y los defensores 
de los derechos trans, reaccionan al fallo del
Tribunal Supremo de UK.


El fallo supone alivio y reivindicación para algunos, pero 

otros lo ven como un ataque perjudicial a sus derechos.



Para quienes defienden la igualdad de género, el fallo del Tribunal Supremo británico, sobre la definición legal de la mujer, supuso un cambio radical que les hizo sentirse reivindicadas y aliviadas. Pero para quienes defienden los derechos de las personas transgénero, fue un ataque perjudicial a sus derechos que marcó el inicio de verdaderos problemas en su lucha por el reconocimiento legal. “Creo que este será el punto de partida, para un impulso mucho mayor, a favor de restricciones manifiestas a los derechos de las personas trans”, declaró Victoria McCloud, quien cambió su sexo legal hace más de dos décadas.



Victoria McCloud, la primera jueza trans del Reino Unido, se trasladó a
 la República de Irlanda después de que su trabajo en el Reino Unido se volviera "insostenible".
Fotografía: Andrew Mason

Siendo la primera jueza trans del Reino Unido, solicitó intervenir en la apelación del Tribunal Supremo, pero le fue denegada. El año pasado renunció a su puesto como jueza, alegando que se había vuelto insostenible porque su identidad trans se consideraba una “elección de estilo de vida o una ideología”. Ahora vive en la República de Irlanda.

McCloud afirmó que el fallo del Tribunal Supremo se produjo en medio de una época preocupante para las personas trans en el Reino Unido, y que marcaría el inicio de una lucha más intensa por sus derechos. "El resto ha sido una guerra fingida. Ahora empiezan los verdaderos problemas", declaró.


"Si yo fuera una persona trans en el Reino Unido en la actualidad, evitaría usar cualquier baño público, a menos que fuera mixto, porque personalmente, por el momento, no puedo decidir si debo usar el baño masculino o el femenino", afirmó. "No he comprendido las complejidades de la sentencia, y sus repercusiones continuarán durante un tiempo. Pero estoy contenta de vivir en la República de Irlanda, donde este problema no lo es. Aquí sé dónde puedo orinar"


El miércoles por la mañana, frente al Tribunal Supremo, Susan Smith, codirectora del grupo de campaña For Women Scotland, crítica con el género y que interpuso la apelación, fue una de las mujeres que celebraron con júbilo el resultado. "Fue todo un acontecimiento salir a ver a un grupo de fotógrafos, y a un montón de gente vitoreando y aplaudiendo. Fue muy emotivo", dijo Smith. "Todas hemos renunciado a mucho para luchar contra esto y hemos tenido que soportar muchos abusos, mucha tergiversación de nuestras motivaciones, nuestra postura y nuestras creencias".


"Por fin tenemos claridad legal, y ahora sabemos que cuando se proporcionan espacios y servicios bajo la Ley de Igualdad y son para un solo sexo, significa exactamente eso. Es un gran alivio"Smith afirmó que el fallo ayudaría a las mujeres a sentirse seguras si hubiera un hombre en un espacio exclusivo para mujeres: "Sabrán que tienen todo el derecho a oponerse a eso"Añadió: "La reasignación de género es una característica protegida, y sigue estando protegidaPero decir que las mujeres eran solo un conjunto amorfo de personas, y que era una identidad que cualquiera podía tener, en realidad minimizaba los problemas reales y diferentes que afectan a hombres y mujeres".


Maya Forstater, quien fundó el grupo de campaña Sex Matters después de ganar un tribunal laboral que determinó que había sido injustamente discriminada debido a sus creencias críticas con el género, dijo que el fallo le trajo "alivio, reivindicación, felicidad y orgullo".

"Esta sentencia ha sido muy clara y proviene del tribunal más alto del país", dijo. "Hay docenas y docenas de mujeres que han tenido que presentar casos en tribunales laborales porque han sido víctimas por simplemente decir lo que creen que dice la ley. Ahora sabemos que teníamos razón". Afirmó que la sentencia judicial trataba sobre "reconocer las normas y la realidad". "Si eres hombre, puedes llamarte como quieras, vestirte como quieras, pero no puedes trabajar en un centro de crisis por violación ni entrar en el vestuario de una mujer", afirmó.


McCloud comentó que también compartía la preocupación por la protección de los espacios para mujeres: "Yo no quiero hombres en los baños de mujeres, gracias". Sin embargo, añadió que las personas con opiniones extremas "consideran peligrosa a alguien como yo" simplemente por su identidad trans. "La ideología crítica de género está en auge, y esto obviamente es un éxito para ellos", afirmó. "Pero la lucha empieza ahora, tanto para ellos como para nosotros, porque querrán potenciar este éxito y nosotros querremos aclarar y proteger los derechos que creíamos tener"


Ellie Gomersall, mujer trans y activista del Partido Verde Escocés, se sintió destrozada al ver la noticia y la describió como "otro ataque más sobre el derecho de las personas trans a vivir nuestras vidas en paz”“Esto solo afectará a las personas trans que tienen un certificado de reconocimiento de género (CRG), que en realidad la gran mayoría de las personas trans no tienen. Pero no quiero restarle importancia a lo perjudicial que es”, dijo. “Establece la idea de que, incluso si superas todos los obstáculos, si pasas por ese proceso realmente deshumanizante y estigmatizante para obtener un CRG, nunca serás reconocido legalmente por quien realmente eres”


Ellie Gomersall añadió: “Algunas personas y organizaciones verán este resultado, y lo usarán como justificación o reivindicación para discriminar aún más a las personas trans, y esto es muy preocupante para mi comunidad”.








24 de abril de 2025

LESBIA Y SU GORRIÓN





EDWARD JOHN POYTER
GRAN FEBRIL...¡PERDÓN!...PINTOR INGLÉS


Lesbia y su Gorrión


Edward John Poynter* (París, 20 de marzo de 1836- Londres, 26 de julio de 1919) fue un pintor inglés figurativo adscribible al academicismo, aunque también relacionado al período prerafaelista.

Hijo de Ambrose Pynter, John Poynter desde su temprana juventud frecuentó Ipswich School y Brighton College. Más tarde continuó sus estudios en varios lugares de Europa, desde Londres hasta Roma. Las obras de Michelangelo influyeron mucho su pintura. Fue un gran admirador de su estilo, lo cual lo llevó a estudiar profundamente sus obras. En sus viajes Poynter se encontró con el pintor estadounidense James McNeill Whistler (hmm... pero no hay comentario alguno sobre ese encuentro).

Se casó en 1866 con Agnes MacDonald. Fue elegido presidente de la Royal Academy en 1896. Recibió el título de Primer baronet (KB PRA) en 1902.


*NOTA - La versión en español, sobre Edward John Poynter, es muy limitada en Wikipedia. Sobre todo, en lo referente a su vida y obra artística. Asumo que esto es debido al amplio contenido erótico-femenino en gran parte de sus temas pictóricos. Si desea conocer más sobre el trabajo artístico de este afiebrado... ¡perdón nuevamente! ... gran pintor, visite la versión en inglés haciendo clic en el link ofrecido al principio de este escrito.





clic





LA DIFERENCIA

The difference between stupidity and genius is that genius has its limits'.
Einstein.




" LA DIFERENCIA ENTRE ESTUPIDEZ Y GENIALIDAD  
ES QUE GENIALIDAD TIENE SUS LÍMITES "
Albert Einstein




The difference between stupidity and genius is t
hat genius has its limits'.
Einstein

14 de abril de 2025

DOS RECUENTOS SOBRE JOSEPHINE BAKER





Josephine Baker: la superestrella convertida en espía 
que luchó contra los nazis y por los derechos civiles

La Guerra Secreta de Josephine Baker por Hanna Diamond
Libro que destaca la contribución de ella en tiempos de guerra, y cómo usó su fama para encubrir y promover la igualdad de derechos.


Fotografía: Sarah Meyssonnier



RECUENTO # 1

Según el teniente Paul Jensen, oficial de contrainteligencia estadounidense en tiempos de guerra, era "nuestro contacto número uno en el Marruecos francés", apoyando la misión aliada "con gran riesgo para su propia vida, y lo digo literalmente. Sin ella, habríamos estado completamente indefensos".
El agente de inteligencia británico Donald Darling la consideraba una "agente especialmente querida del gobierno de Charles de Gaulle". Consciente de su importancia, el servicio de inteligencia exterior británico, el MI6, la llamó "la agente predilecta" de la Francia Libre.

Antes de la Segunda Guerra Mundial, Josephine Baker había sido "la Venus Negra": la primera superestrella femenina de color del mundo, bailando charlestón vestida solo con perlas y una falda hecha de plátanos, desfilando con su guepardo mascota, escandalizando y deleitando a todo París.
Tras la guerra, Baker se convirtió en una destacada y franca defensora de los derechos civiles en Estados Unidos, siendo famosa por su intervención con Martin Luther King Jr. en la Marcha sobre Washington de 1963, y por adoptar a 12 niños de ocho países para que vivieran con ella en su castillo de la Dordoña.

Durante la guerra, ejerció como espía. Envueltas en la niebla de la guerra, y posteriormente relatadas, a menudo de forma poco fiable, en las memorias de personas (incluida la propia Baker) con una historia que contar, las hazañas de la artista durante la guerra han sido objeto de especulación y mitos durante mucho tiempo.
Pero un nuevo relato, basado en fuentes contemporáneas y a menudo no utilizadas, se han descubierto pruebas de que Baker no solo era una agente muy eficaz, sino que también utilizaba su misma celebridad como la tapadera perfecta para su espionaje, y también como un poderoso medio para promover la causa de igualdad por derechos civiles.

“Mirar su vida a través del prisma de la guerra nos ayuda a comprender quién era y a comprender lo que hizo después”, afirmó Hanna Diamond, profesora de historia francesa en la Universidad de Cardiff y autora de Josephine Baker’s Secret War, que se ha publicado recientemente.
“La guerra fue fundamental; es la pieza que faltaba en su rompecabezas. Ella estaba increíblemente bien preparada para ser espía; una artista de pies a cabeza. Su motivación provenía de la enorme deuda que sentía con Francia, que la había convertido en una estrella, y que tenía sus raíces en el racismo con el que creció”.



Josephine Baker recibe la Legión de Honor y la Cruz de Guerra en 1961.

Fotografía: AFP/Getty Images


Nacida en 1906 en San Luis, Missouri USA, Baker dejó la escuela a los 12 años, y en 1921 fue elegida para participar en uno de los primeros musicales de Broadway, exclusivamente para negros. Cuatro años más tarde, consiguió un puesto en un espectáculo parisino: La Revue Nègre, y zarpó rumbo a Francia donde se convirtió rápidamente en una gran estrella.
En 1939, cuando fue reclutada por Jacques Abtey, un agente de la inteligencia francesa inicialmente escéptico, y quien se convertiría en su contacto y amante intermitente, Baker era la artista mejor pagada de Europa y una de sus celebridades femeninas más conocidas.

Abtey le enseñó trucos del espionaje, como el uso de la tinta invisible. Pero fue su amplia fama significó que todos y en todas partes querían conocerla. Fue su encanto natural, que les permitía hablar con total libertad, sus verdaderas bazas en el espionaje.
Desde principios de 1941, Baker, bajo la égida de los servicios secretos franceses, viajó desde Marrakech (donde estaba destinada) a Lisboa, Madrid, Sevilla y Barcelona, y por el norte de África. En estos lugares ofrecía conciertos, y asistía a recepciones donde recopilaba, y luego transmitía información ultra secreta a los agentes aliados.

Demostró ser lo suficientemente experta en ello como para ser condecorada, después de la guerra, con la medalla de la resistencia. Más tarde, con la Legión de Honor y la Cruz de Guerra militar.
Aunque el contenido exacto de las notas que tomaba, a menudo sujetas con un alfiler en sus sostenes, no se registraron oficialmente en muchos casos y siguen siendo desconocidos, la investigación de Diamond sugiere que en ocasiones resultaron sumamente valiosas y cruciales.

Fuentes no utilizadas previamente muestran, por ejemplo, que tras el desembarco aliado en el norte de África en 1942, Baker y los líderes locales con los que se había relacionado desempeñaron un papel crucial en la asistencia al contraespionaje estadounidense en Marruecos, identificando a espías nazis y permitiendo cientos de arrestos.
"Ahora sabemos que continuó siendo una intermediaria clave entre franceses, estadounidenses y marroquíes durante 1943 y 1944", declaró Diamond. "Hace tiempo que conocemos algo sobre sus actividades de espionaje aliadas. Pero este papel como intermediaria vital es nuevo”.

De igual manera, fuentes contemporáneas muestran que la bien documentada campaña antirracista de posguerra de Baker ya estaba en marcha a principios de la década de 1940. Sus giras por los campamentos del ejército estadounidense en el norte de África la pusieron en contacto directo con la segregación racial que había dejado atrás en 1925.
Entrevistas de prensa de la época dejan muy claras sus motivaciones para actuar: "Hago todo lo posible para ayudar a ganar el esfuerzo bélico", declaró al Chicago Defender en 1943, pero también "para que la gente, en general, sea más agradecida y comprensiva con mi raza".

Ganar la aceptación de las tropas para las que cantaba y bailaba tenía como objetivo promover la tolerancia racial en casa. Ese mismo año, Baker declaró al periódico Palestine Post (un importante diario en idioma inglés publicado en Jerusalén durante el Mandato Británico de Palestina desde 1932 hasta 1950): "Cada éxito que tengo cuenta para mis hermanos de color en Estados Unidos". En el norte de África, Baker actuó, inusualmente, para un público de tropas estadounidenses no segregadas. Al actuar para las fuerzas británicas, también fue objeto de desagradables comentarios racistas, aparentemente de tropas sudafricanas, según registró el oficial de entretenimiento de las fuerzas armadas británicas, Henry Hurford Janes.

La pregunta era existencial, dijo Diamond. “La discriminación influyó en su decisión de quedarse en Francia. En París, se había distanciado de los demás exiliados afroamericanos. Quería ser francesa y, cuando llegó la guerra, a diferencia de otros que abandonaron Francia, se quedó para apoyar a sus compatriotas”. Sin embargo, Baker se negó a actuar en el París ocupado, mudándose a Dordoña días antes de la llegada de los alemanes y, posteriormente, al Marruecos controlado por Vichy. Su matrimonio en 1937 con Jean Lion, que le otorgó la ciudadanía francesa, reforzó sus opiniones. Lion era judío y Baker ayudó a su familia a escapar de los alemanes. “Sabía muy bien, de primera mano, lo que significaba el racismo nazi”, dijo Diamond.

En contraste, su ferviente gaullismo (mantuvo correspondencia frecuente con el general mucho después del final de la guerra, revela el libro) y su idealización de Francia la llevaron a guardar silencio durante gran parte del conflicto cuando sus colonias norteafricanas lucharon por la independencia.
En 2021, Emmanuel Macron decidió que Baker debía convertirse en la primera mujer negra en entrar al Panteón de París, el mausoleo de los "grandes hombres" de Francia. El presidente francés hizo referencia a sus actividades durante la guerra, que fueron una revelación para muchos.

Dijo Diamond, "En Francia se la conoce principalmente como estrella del music-hall,  y en Estados Unidos como activista por los derechos civiles". Todo un capítulo: las misiones de espionaje, los conciertos que recaudaron grandes sumas para la resistencia, su posterior servicio uniformado en la fuerza aérea francesa resultaba mucho menos conocido.
Tras comenzar su investigación, con cierto escepticismo, Diamond afirmó que la terminó "convencida de que Baker era realmente muy valiosa. Puede que no siempre supiera lo que transmitía, pero hizo lo que le dijeron e hizo lo mejor que pudo".

La imagen que emerge, según Diamond, es la de una mujer negra "increíblemente capaz, astuta y comprometida. Vio con mucha claridad que podía explotar su fama por una causa, y a menudo con gran valentía, simplemente lo hizo". Durante la guerra, Baker movilizó su talento como artista, tanto dentro como fuera del escenario, para la Francia Libre. Tras la guerra, aplicó lo aprendido, aprovechando eficazmente su fama para protestar contra las políticas de segregación racial de su país natal.
“Conocer mejor sus experiencias en tiempos de guerra nos ayuda a comprender cómo ella misma llegó a comprender lo que podía lograr”, afirmó Diamond. “Fue la guerra, el trabajo de inteligencia y la actuación, lo que la hizo consciente de su poder”.


Original del periódico británico THE GUARDIAN
Traducción: por Oliverio Funes Leal, con la ayuda de Google Translate



Josephine Baker: una gran amiga de Cuba por Maria del Carmen Mestas


RECUENTO # 2


Con su espectacular baile de los plátanos, se convirtió en la reina de la noche parisina. En 1950, cuando Josephine Baker, la célebre artista afroamericana, visitó Cuba por primera vez, se le negó alojamiento en el Hotel Nacional debido al color de su piel. Pero, en 1966, los escenarios cubanos volvieron a brillar con su presencia.

Ese año, la extraordinaria cantante estadounidense llegó a Cuba como invitada ilustre. 

Algunos años antes, un empleado del Hotel Nacional, cumpliendo órdenes estrictas, le había dicho con tono que pretendía ser cortés: "Señora, estamos en plena temporada turística; no tenemos ni una sola habitación libre".


Esa fue la excusa de la gerencia para negarse a alojar a la artista negra. Un escándalo estalló en la prensa. Pero Josephine, con su conocida majestuosa dignidad, se alojó en un hotel más modesto.

La reina de las revistas musicales francesas había llegado a la capital cubana procedente de México. Durante cinco semanas, el Teatro América estuvo abarrotado. Cantó canciones de su selecto repertorio, acompañada por su esposo, Jo Bouillon, violinista y director de orquesta. Su talento dramático se hizo evidente al interpretar a Mary Stewart de Escocia, como lo había hecho en el Folies Bergère de París.

Durante una de las funciones, alguien le gritó desde su asiento:


"¿Y los plátanos? 🍌🍌🍌🍌...

Y ella respondió rápidamente:

¡Me los comí durante la guerra!"



Había pasado varios años desde aquella primera vez. Ahora, Josephine regresaba como invitada especial a la Conferencia Tricontinental. 

Esta vez actuó en el Teatro Amadeo Roldán, visitó Camagüey, y tres mil personas la aplaudieron con entusiasmo en un estadio deportivo. Incansable, recorrió la Sierra Maestra, donde percibió el aroma de los antiguos cafetales franceses de Gran Piedra... y, sobre todo, estableció contacto con la gente. El paisaje humano la deslumbró.

El comediante cubano Carlos Ruiz de la Tejera la acompañó en una de sus giras por Cuba. Josephine Baker capturó la esencia de la cultura de su época y la reflejó en sus espectáculos. Utilizó textos de los mejores poetas, canciones sobre el amor, sobre la vida. Batalló con ahínco contra la discriminación racial, y recibió la Legión de Honor francesa por su lucha contra el fascismo.


Recuerdo su bondad, su amor por la humanidad. En su viaje a Cuba trajo consigo a sus hijos adoptivos, uno de ellos recogido, según me contó, de un cubo de basura. Estar a su lado confirmó muchas de las ideas que tenía sobre cómo debía ser un artista: cómo concentrarse, cómo prepararse psicológicamente antes de una presentación en público. Entre espectáculo y espectáculo, hacía ejercicios para relajarse y mantenerse en forma. Gracias a eso, a sus 60 años, tenía una figura y una agilidad envidiables.

Nació en una familia muy humilde, Saint Louis, EE.UU. en 1906. Se enamoró de la danza siendo aún niña. A los ocho años realizó su primera actuación. De adolescente, actuó en el New York Music Hall y en el Plantation Club de Harlem, donde su éxito fue en aumento. Fue contratada para protagonizar la Black Revue, y París se rindió con entusiasmo a su arte, el cual revalorizó a los artistas de clubes nocturnos.


Con su espectacular baile, de plátanos colgando en las caderas, revolucionó las noches parisinas. Se convirtió en artista exclusiva del Folies Bergère. Comenzó como cantante en el cabaret Chez Josephine y estrenó su revista Paris qui Remue (Paris que Conmueve). Dos canciones que dieron la vuelta al mundo la lanzaron a la fama internacional: J'ai deux amours (Tengo Dos Amores) y La petite Tankinoise (La Pequeña Niña Tonkinesa).

Trabajó en varias películas, como La Princesa Tan Tan, con música de su querido amigo, el compositor cubano Eliseo Grenet.

Josephine Baker libró una de sus últimas batallas en Les Milandes, el antiguo castillo francés donde educó a sus 13 hijos adoptivos, y del cual el propietario intentó desalojarla por retraso en el pago del alquiler.


Enferma y casi muerta de frío, la artista que había tenido un hermoso sueño fue finalmente hospitalizada. Su aspiración de crear una escuela universal de fraternidad fue detenida. El proyecto había comenzado varios años antes: Platanitos se había convertido en madre de huérfanos de diferentes nacionalidades, a quienes quería educar sin prejuicios raciales ni religiosos.

Su mayor anhelo era establecer un centro donde 400 niños de todo el mundo pudieran aprender a vivir como verdaderos hermanos. Un capítulo de la vida de Josefina Baker se había cerrado dramáticamente, y sus esperanzas se vieron truncadas por el momento.


Regresó a los escenarios, que ella iluminó con su mirada. Más allá de todos los insultos e injusticias, Josefina Baker se destacó y reinó en las noches parisinas. "Vuelvo al teatro por mis hijos. Muchos dicen que este regreso es una locura, siendo vieja y rica, que es una imprudencia. Pero, ¡la realidad es que no soy rica! Soy pobre y tengo que mantener a mis hijos".




En abril de 1975, actuó en el Teatro Bobino para
celebrar sus 50 en el mundo del espectáculo.
Se la veía vivaz, siempre sonriente...pero su corazón no pudo 
resistir más las fatigas, todo el dolor y las emociones.






8 de abril de 2025

RESIGNACIÓN






RESIGNACIÓN
J.D. McClatchy


"Me gustan los árboles porque parecen más resignados,
que otras cosas, a la manera de vivir que tienen" 




Aquí el roble y el abedul de torso plateado

De pie en su intimidad sosegada

Mientras bajo tierra, como en espejo oscuro,

Han ocultado agravios enlazados

En idéntica bifurcación al calmo de encima

Pero atrapados allí, tejidos unos a otros

Aferrados a lo que da vida y es suficiente cruel.

Mas en el aire ninguno trata de mantener compañía

O cambiar su fortuna. Ellos parecen apoyarse

En la luz, despreocupados de lo que el mundo

Haga de sus dignidades, y no mostrarán

perspicacia en sus días por quedar.

De nunca ser amados como hubieran querido

O merecían, de la infatuación súbita de alguien

Anotada en un flanco, de lo que se les ha obligado

A proteger y esconder, ellos se han resignado.





McClatchy nació como Joseph Donald McClatchy Jr., en Bryn Mawr, Pensilvania en 1945. Estudió en Georgetown y Yale, donde recibió su doctorado en 1974. 

Vivió en Stonington, Connecticut, y Nueva York. Su esposo fue el diseñador gráfico Chip Kidd. Su pareja de 1977 a 1989 fue el poeta Alfred Corn.


Poema traducido por Oliverio Funes Leal

con la asistencia de Google Translate